Después de unos cuantos días saliendo en Kayak y sus respectivas palizas a remo, conseguimos coger un buen día con luna llena y levante con la mar casi calma sobre las 7 de la tarde. Dando vueltas y salvando unos cuantos trasmallos perennes en la zona, llegamos a algo que nunca había visto, por lo menos un kilómetro de pompas en medio del mar y un olor fuerte a pescado fresco, desvelando al llegar a la zona que eran caballas que nos picaron al entrar, aprovechando la oportunidad de coger unas cuantas para comer y en una de las pasadas al río de pompas nos llega este bonito listado de 1k 100g de peso que dio una preciosa batalla capturado con artificial imitación a un boquerón.
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